Tras el desastre en Ecuador, jóvenes en acción

Un grupo de estudiantes de la Universidad de los Hemisferios explican cómo han ayudado a los damnificados que dejó el terremoto del pasado sábado 16 de abril en Ecuador. Llenaron un camión de dos toneladas que irá a Manabí, en la costa del país.

A pesar de que la zona en donde se encuentra la Universidad de Los Hemisferios casi no se vio afectada por el terremoto con magnitud de 7.8, un grupo de estudiantes de diferentes carreras unieron fuerzas para recibir donativos y formar uno de los centros de acopio más importantes de la ciudad. La Universidad se ofreció como centro oficial de acopio en coordinación ante las autoridades de Gobierno a primeras horas del domingo 17, poco después del desastre.

“Desde que nos enteramos de la gravedad del terremoto, sabíamos que teníamos que hacer algo al respecto. Y el mejor medio era la universidad…”, señaló José Ignacio, uno de los estudiantes que se encuentran a la cabeza del proyecto

“La recepción de donativos arrancó el domingo, gracias a la participación de estudiantes, profesores y personal administrativo poco a poco la cantidad de insumos ha ido incrementado y eso nos llena de alegría”, dijo José Ignacio mientras distribuía unos insumos médicos.

El día lunes 18 conforme los estudiantes fueron llegando a las instalaciones de la Universidad, los pasillos se llenaban de gente sellando cajas, clasificando ropa, cargando paquetes. Otro de los organizadores y pioneros de la recolección de donativos fue Darío, quien explicó: “Hubo un momento en el que había muchas manos y tuvimos que organizarnos bien para que todo funcionase bien”

Martín es uno de los participantes más jóvenes de esta iniciativa. “Estoy feliz y sé que soy mucho más útil desde aquí. Hay mucha gente que quiere viajar a las zonas afectadas, pero no es el momento. Cuando en realidad vayamos a ser ayuda allá no voy a dudar un segundo en dar una mano, por el momento gracias a la Universidad puedo ayudar desde Quito”.“No solo queremos formar grupos de la Universidad para ayudar a los damnificados -dijo Diego Jaramillo, rector del centro académico. Estamos abiertos a que puedan sumarse los que quieran y de la manera que quieran. Estamos abiertos a trabajar por el país”.

El Rector leyó parte de la Carta que el Prelado del Opus Dei envió a Ecuador. Uno de los estudiantes aseguró que "la gente de los distintos pueblos y ciudades afectadas lo están pasando muy mal. A momentos, la tristeza aparece entre quienes estamos trabajando, y no dejan de salirnos algunas lágrimas al saber el sufrimiento de tanta gente".

“Vamos a seguir trabajando en esto, tenemos que ser perseverantes y darnos cuenta que una semana de trabajo no es ayuda. Si en realidad queremos aportar con algo tenemos que elaborar un proyecto a largo plazo. Sin embargo, es un gran inicio”, dijo Juan José, mientras escribía mensajes animantes en las latas de comida que se están enviando a los ecuatorianos que más lo están necesitando.